En un clásico muy caliente, Belgrano y Talleres terminaron igualando 1 a 1 en el Gigante de Alberdi por la 11a fecha del Torneo Apertura.

En un partido parejo, Talleres fue el mejor en la primera parte y el Pirata jugó mejor que la visita en el complemento. Un tiempo para cada uno, dicen en el barrio. Y está bien porque dio la sensación que si Talleres se hubiese animado a más podría haber aumentado el marcador. Y ya en el segundo tiempo, tras la igualdad Belgrano lo tuvo para ponerse arriba.

El partido se abrió a los 19′, cundo el brasileño Rick Lima Morais puso el 1 a 0 para los albiazules luego de que Botta peleara y recuperara una pelota cerca del lateral y el brasileño la tomó para ir recorriendo el borde del área grande de derecha a izquierda y repentinamente sacó un sablazo que se metió en el palo izquierdo de Espínola. Golazo y 1 a 0. 

No había pasado mucho en el partido, que fue de trámite muy parejo hasta el gol. Luego, el Celeste pareció sentir el golpe del gol y se mostró impreciso y nervioso.

Buen primer tiempo de Juan Carlos Portillo, muy seguro en los cruces y anticipos, y de Benavídez. Nahuel Bustos por momentos pareció sobrar el partido, y terminó amonestado.

En el Celeste, quizá el punto más alto fue el de Alexis Sánchez y Longo, que mostraron sacrificio y recuperación de la pelota. Pero al local le faltó juego, creatividad y determinación.

Ya en la segunda parte, Belgrano fue otro con el ingreso de Uvita Fernández, que rápidamente se convirtió en el protagonista del Pirata, ante un Talleres que mostraba una cara muy diferente a la del primer tiempo.

El mismo Uvita lo tuvo a los 8′, cuando la pelota dio en el travesaño tras enfrentar a Herrera. A los 14′, Passerini definió por arriba del travesaño y a los 17′ llega el penal de Herrera a Uvita Fernández, que Jara cambió por gol para el 1 a 1.

Luego lo pudo haber ganado el Pirata, con Reyna tras un centro de Uvita y también Zelarrayan, con un cabezazo apenas afuera. Igualmente, la T lo pudo ganar con una oportunidad increíble que Depietri desperdició tras una asistencia de Girotti.