El cardenal es un pájaro que genera curiosidad no solo por su particular plumaje de color rojo, sino además porque es una especie que no migra. Es representativa de al menos siete estados de Estados Unidos, donde encontró su mejor hábitat.
Sin duda, uno de los aspectos más relevantes de esta ave es el color de sus plumas que la hacen fácilmente observable. En cuanto a su alimentación, fuera de los entornos urbanos, el cardenal se nutre de insectos, semillas, granos y frutos.
El cardenal es conocido como “ave roja” y suele habitar en zonas con climas templados, como los del sudeste de Estados Unidos. Los últimos años extendió sus zonas de influencia y actualmente se pueden encontrar ejemplares en Canadá.
En este grupo de plumíferos, el macho es el que se lleva la mejor parte, ya que solo él porta el llamativo y característico plumaje. Está demostrado por los científicos que cuanto más brillante es, mayores chances tendrá para aparearse.
Aunque las hembras presentan un atractivo tono entre castaño y gris, ambos suelen cantar una gran variedad de melodías. Son lo suficientemente territoriales como para ponerse agresivos si los atacan.
Una curiosidad vinculada a este tema es que su conducta agresiva para defender a sus crías muchas veces los lleva a chocar contra ventanas. Lo que sucede es que, en su afán de atacar, en realidad se confunden con su propio reflejo.
Grupos de familia
Otra de las principales condiciones del cardenal es que es extremadamente sociable y suele moverse en bandadas a las que, en ocasiones, se unen pájaros de otras especies. Cuando vuelan, muestran sus mejores dotes en el canto.
Sin embargo, cuando llega la época de apareamiento, las bandadas se desarman y ya el vuelo será en pareja. Los cardenales son monógamos: los machos alimentan a las hembras mientras estas incuban los huevos, normalmente tres por nidada.