Porciones / número de personas: 4 personas
Tiempo de Preparación: 15 minutos
Tiempo de cocción: 40 minutos
Categoría: Carnes
Ingredientes para preparar Solomillo de Cerdo en Salsa de Cerveza
1 solomillo de cerdo
1 cebolla grande (picada en juliana)
3 dientes de ajo (picados finamente)
350 g de champiñones (limpios y cortados en mitades o cuartos)
1 lata de cerveza (aprox. 330 ml, rubia o negra según tu gusto)
200 gr de caldo de pollo o agua
Un puñado de orejones (albaricoques secos, cortados en trozos pequeños)
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta al gusto.
Cómo preparar Solomillo de Cerdo en Salsa de Cerveza
Este solomillo de cerdo en salsa de cerveza es una receta fácil, jugosa y llena de sabor. La cerveza aporta un toque caramelizado y los orejones un contraste dulce que combina a la perfección con los champiñones y la carne. Es un plato ideal para ocasiones especiales o simplemente para disfrutar de una comida deliciosa en casa.
Sal pimenta el solomillo de cerdo por todos lados. En una sartén grande o cazuela, calienta un chorro de aceite de oliva a fuego medio-alto. Dora el solomillo por todos los lados hasta que esté bien sellado (unos 3-4 minutos por cada lado). Retira el solomillo y resérvalo en un plato.
En la misma sartén, añade un poco más de aceite si es necesario y sofríe la cebolla y los ajos a fuego medio hasta que estén dorados y caramelizados (unos 10 minutos). Incorpora los champiñones y cocina durante 5 minutos más, removiendo ocasionalmente. Añade los orejones troceados y mezcla bien.
Vierte la cerveza y deja que se evapore el alcohol durante 3-4 minutos a fuego medio-alto. Agrega el caldo de pollo y mezcla bien. Introduce el solomillo en la salsa y cocina a fuego bajo durante 20-25 minutos, girándolo a la mitad de la cocción.
Retira el solomillo y deja reposar 5 minutos antes de cortarlo en rodajas gruesas. Reduce la salsa si es necesario y ajusta la sal y pimienta. Sirve el solomillo con los champiñones, orejones y la salsa por encima.
Para un toque más intenso, usa una cerveza negra o tostada. Me encanta acompañarlo con puré de patatas y un buen pan, para poder disfrutar mejor la salsa. Si no tienes orejones, puedes sustituirlos por pasas o ciruelas secas para un sabor similar.
